MONSTROUS

Año: 2022
Duración: 89 min.
País: Estados Unidos 
Dirección: Chris Sivertson
Guion: Carol Chrest
Reparto: Christina Ricci, Santino Barnard, Don Baldaramos, Colleen Camp, Lew Temple, Carol Anne Watts, Nick Vallelonga, Rachael Edlow









 Ya lo he mencionado anteriormente, pero nunca está de más el volver a señalar que cuando la lista de productores (incluyendo productores ejecutivos y co-productores) es igual de larga que la del reparto casi siempre es señal de que algo no anda bien. Simplemente no es sano para una película que haya tantos involucrados con pensamientos distintos en la manera de realizarla porque indiscutiblemente existirán conflictos que terminarán afectándola y con Monstrous tenemos otro de los tantos ejemplos de esto.

Y es que con el increíble número de 51 productores (no es broma) lo que nos presenta Sivertson en ningún momento logra establecer una identidad y eso termina afectando a una historia que se quiere sostener en base a temas como el abuso o la estigmatización de la mujer soltera en los años 50, pero que resulta tan blanda en su construcción que realmente no deja demasiadas cosas para destacar en ese sentido. Sobre todo porque siempre se la pasa jugando con la idea de que los miedos de Laura sobre su ex esposo pueden ser reales o solo producto de su imaginación, provocando con esto que realmente cualquier intento de profundización al respecto siempre esté al filo de revelar demasiado de forma tempranera y con ello se arruine algo fundamental que ocurre más adelante.

Todo esto bajo un ritmo que no es precisamente pesado y que ayuda a que el tema del monstruo se pueda manejar inicialmente con cierta dinámica que permita crear algunos momentos interesantes desde el lado del terror; sin embargo, esto se aprovecha muy poco. Más que nada porque se decide darle mayor importancia a la relación madre-hijo hasta un punto que te resulta fastidiosa y termina orillando a todo el elemento supernatural a situaciones muy vagas que no aportan intensidad o, para empeorar las cosas, vuelven demasiado obvio lo que va a suceder en la parte final.

La cual nos ofrece un giro que no te termina sorprendiendo como debería y por lo consiguiente carece de impacto. Dejándolo como un simple recurso fallido dentro de un desenlace que además vuelve irrelevante todo el tema del ex esposo y no tiene grandes consecuencias para nadie.

En cuanto a las actuaciones tenemos a Christina Ricci siendo lo mejor de la película con un personaje que bien podría haber caído en algo mucho más ridiculizado, pero que logra mantener en un punto medio para cada situación. Mientras que en producción se nota un buen cuidado: el trabajo de fotografía cumple, la dirección de está bien, el score es sólido, el trabajo de sonido no presenta fallos y los efectos en general son muy básicos.